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domingo, 30 de octubre de 2011

Culpar a los demás


Dicen que el viaje  en autobús es  tedioso, aburrido  y hasta  a otros les da nauseas de tanto humo contaminante y también por el esfuerzo de la vista que les produce este hecho. Yo lo tomo como en el momento que tengo que acumularme de energía  para ir mas fresco en el trabajo, sea la música, dormir o simplemente mirar y  pensar logra que mi cuerpo  y la mente se  recarguen de energías.
Hoy resulta que me entretuve en todo el viaje que dura de mi casa hasta mi trabajo y en la ahora yo les escribo esta nota.
Desde que aborte  ese  auto  y al tener que seleccionar mi asiento para poder  descansar, por que si no hay asiento, eso para mi si  ya es tedioso. O la gente sale tarde o yo tan temprano que aun hay asiento. Bueno divise en unos de los asientos una chica que por un momento pensé que la conocía, ¿DONDE  LA HE VISTO?  Me rajaba la cabeza. Ese pelo corto y lacio ese rostro  flácido. Pero me  recordé por esa sonrisa y la seriedad con la que una vez fue a mi estación a pedir prestado unas bolsas y unos precintos (Trabaja en otra estación). Aquella vez que  vino a pedir prestado aquellas cosas, no es la primera vez, la he visto ocasionales veces como en la capacitaciones entrenamiento y en su misma estación, pero siempre con un chico que pensé que era su enamorado.
Ya que había recordado que efectivamente era ella, pensé que era hora de ya no rajarse tanto  la cabeza, yo soy olvidadizo y olvido caras y la mejor manera  de recordar es hacer el mejor esfuerzo, así no sufriré de Alzheimer. Pero ya casi desviando  la mirada a la ventana, el hombre que estaba a su costado  le abrazo y solo con el beso borro de su rostro esa seriedad.
Ahora quien ese hombre no se como se llame o tal no recuerde, pero lo que si estoy seguro es que,  no es el chico con que estuvo en las otra ocasiones. Esa  pareja que veía allí  sentados la pegaban de cursis o eran cursis, no lo se. Pero se notaba que se quería. Y yo preguntándome y pegándomela de juez moral. el por que hacen esas cosas.  Como si yo no supiera lo que es eso. Miles de preguntas y miles de acusaciones pasaban en mi cabeza.  
Cuando ella se disponía a bajar en la estación  donde trabaja  ambos se despidieron con un beso y bajo aquella chica, cual cámara lenta  su pelo giro lentamente seguido de su cabeza y la mirada buscando aquel tipo  y se despidió con el beso volado.
Hasta hay era medio confuso la historia  pero en ese momento di por culminado la historia. La historia que cree en mi mente de una novela, el ¿por que? los motivos que motivaron a hacer eso la chica... todo termino o creí que había terminado.
Ya bajando de autobús  un tumulto de gente  me empujaba para hacer lo mismo que yo, llegar temprano al trabajo. Cuando mire de reojo atrás era aquel individuo. Sin  mayor importancia cruce  el semáforo y el también, pero ganándome la carrera se adelanto y una cuadra adelante. Lo vi con una mujer abrazándola.
Culpar a los demás es no aceptar la responsabilidad de nuestra vida, es distraerse de ella